Ante el escenario de incertidumbre generado por las posibles políticas arancelarias que impulsa el presidente estadounidense Donald Trump, el Gobierno de Coahuila ha desplegado una estrategia económica orientada a proteger su plataforma industrial, con énfasis en el sector automotriz, una de las principales fuentes de empleo y exportación en la entidad.
Luis Olivares Martínez, secretario de Economía estatal, informó que ya se han activado acciones concretas para contener los efectos adversos que podrían derivarse de una eventual escalada comercial entre México y Estados Unidos, principal socio comercial de la región.
“Si bien no se han registrado paros técnicos, hemos detectado una desaceleración en la toma de decisiones de inversión. Esa pausa obedece a la inestabilidad global, por lo que decidimos actuar de forma preventiva”, señaló el funcionario.
Uno de los ejes centrales de esta estrategia es la reducción de la dependencia de insumos importados, apostando por una integración más sólida de proveedores locales. El objetivo es no solo blindar al sector frente a riesgos externos, sino también avanzar en el cumplimiento de los lineamientos del T-MEC, particularmente en materia de contenido regional.
“Estamos realizando un mapeo detallado de las cadenas productivas en el estado para identificar puntos clave donde puedan integrarse empresas locales como nuevos proveedores. Este enfoque permitirá generar valor interno y mayor resiliencia ante eventuales restricciones”, explicó Olivares Martínez.
El plan contempla además la apertura de una ventanilla especializada para acompañamiento empresarial, enfocada en asesorar a inversionistas y apoyar a las industrias en el cumplimiento normativo del T-MEC. Las empresas que logren avanzar en procesos de sustitución efectiva de insumos podrán ser beneficiarias de incentivos estatales.
Como parte de las acciones ya en marcha, se han iniciado recorridos en plantas industriales para identificar oportunidades de fortalecimiento en las cadenas de suministro locales. La meta es robustecer las cadenas de valor para hacer frente a posibles tensiones comerciales con mayor autonomía productiva.
Olivares Martínez destacó la relevancia de Coahuila en el entorno económico nacional. En la entidad operan cinco de las diez principales empresas exportadoras de México, entre ellas firmas como Stellantis, General Motors, Daimler Trucks, Constellation Brands e Industrias Peñoles.
“Estas compañías son pilares estratégicos no solo para el desarrollo de Coahuila, sino para el dinamismo económico del país. Por eso mantenemos un canal de comunicación directo y constante con ellas, con el fin de anticipar cualquier impacto derivado del entorno internacional”, subrayó.
Con esta batería de medidas, el gobierno de Coahuila busca consolidar su posición como un nodo industrial competitivo, adaptable y preparado para enfrentar escenarios económicos adversos sin frenar su crecimiento.
Fuente: El Siglo de Torreón