México
El gobierno de México calificó como “falsas” las acusaciones del Congreso de Perú que llevaron a declarar persona non grata a la presidenta Claudia Sheinbaum, y rechazó cualquier tipo de injerencia en los asuntos internos del país andino.
En un comunicado, la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) sostuvo que la determinación del Congreso peruano carece de fundamento y reiteró que la actuación del Estado mexicano se apega estrictamente al derecho internacional y a los principios históricos de su política exterior.
La cancillería subrayó que la decisión de otorgar asilo político a la ex primera ministra Betssy Chávez Chino —quien formó parte del gabinete del destituido expresidente Pedro Castillo— se realizó conforme a la tradición diplomática mexicana y al marco jurídico que regula el asilo como un acto humanitario y pacífico.
“El otorgamiento de asilo político a la ciudadana Betssy Chávez Chino se decidió en estricto apego al derecho internacional, el cual resulta vinculante tanto para México como para Perú”, precisó la SRE.
El gobierno mexicano también recordó que la Asamblea General de la ONU reconoce el asilo como un mecanismo legítimo de protección que no debe interpretarse como una acción hostil hacia otro Estado.
El lunes pasado, el gobierno interino de José Jerí anunció la ruptura de relaciones diplomáticas con México, tras considerar que la protección brindada a la ex primera ministra representaba una intromisión en los asuntos peruanos.
El episodio reaviva las tensiones bilaterales entre México y Perú, socios en la Alianza del Pacífico junto a Chile y Colombia, que se arrastran desde 2022, cuando el expresidente Andrés Manuel López Obrador manifestó su respaldo a Pedro Castillo tras su destitución y detención.
A partir de entonces, el gobierno de Dina Boluarte —recientemente removida— declaró persona non grata al embajador mexicano Pablo Monroy y ordenó su salida del país.
En el ámbito legislativo, la presidenta del Senado mexicano, Laura Itzel Castillo (Morena), expresó su “extrañamiento” ante la decisión del Congreso peruano y rechazó cualquier acusación de intervención por parte de México. Asimismo, llamó al restablecimiento del diálogo diplomático entre ambas naciones.
Fuente: La Jornada